Aprende a preparar Macarrones con salsa blanca, paso a paso y deliciosos.

¿Sabías que los latinoamericanos consumimos aproximadamente 10 kilos de pasta al año? Y los que llevan la delantera son los argentinos, los venezolanos y los chilenos; ¡aunque a nivel mundial nadie puede superar los 28 kilos anuales de los italianos!

Las pastas gustan a todo el mundo, los espaguetis, los ñoquis, los macarrones o también las pastas rellenas como los ravioles o los canelones. ¡Y sabemos que a nuestros niños les encantan!

Además, las pastas son muy versátiles porque podemos acompañarlas simplemente con aceite, manteca y queso rallado o cualquier otra salsa de tomate, champiñones, aguacate; carnes, pollo, pescados y mariscos. Las variantes son infinitas.

Los especialistas por unanimidad han llegado a la conclusión de que las féculas como las pastas no engordan, salvo si las consumimos de manera excesiva. En efecto, los hidratos de carbono que contienen se asimilan de manera lenta por parte del organismo y retrasan más el hambre. Esto hace que sea más fácil evitar “picotear” entre comidas.

Las pastas no tienen grasas y como muchos otros derivados de los cereales como el arroz o las legumbres secas, constituyen buenas fuentes de vitaminas y minerales en especial cuando no están demasiado refinadas.

Es así como encontramos en las pastas vitamina B1 y B3, además de vitamina B9 (ácido fólico) esenciales para los glóbulos rojos y para el sistema nervioso del feto, pero también aportan minerales como el magnesio necesarios para el impulso nervioso y la contracción de los músculos al igual que fósforo, importante para el sistema óseo.

Hoy vamos a preparar una receta hiper completa que sabemos les va encantar a tus niños porque son una forma de consumir pasta que puedes adaptar a cualquier tipo. En esta oportunidad vamos a utilizar macarrones, pero puedes variar los tipos de pasta y utilizar todas las que gustes.

Vamos a acompañar estos macarrones con una típica y clásica salsa “Bechamel”, comúnmente llamada salsa blanca. ¡Es deliciosa!

Veamos los ingredientes.

(Para dos personas).

– 200 g de macarrones.

– 100 g de queso gruyere o cualquier otro queso rallado.

– 3 cucharadas de harina de trigo.

– 3 cucharadas de manteca o el equivalente en aceite de oliva.

– 350 ml de leche tibia.

– Perejil picado, a gusto.

– Sal y pimienta, a gusto.

Preparación:

– Comenzamos por colocar abundante agua en una cacerola, a fuego fuerte.

– Una vez que haya hervido el agua, agregamos la pasta junto con un puñado de sal. Revolver para que no se peguen.

– Mientras se cocinan los macarrones, colocamos en una sartén bien grande la manteca o el aceite de oliva.

– Una vez que se haya derretido la manteca, en caso de que hayas elegido manteca, agregar la harina y revolver para que se integre bien.

– Incorporar la mitad de la leche y seguir revolviendo. Es posible que se espese mucho y es ahí cuando agregarás el resto de la leche.

– Seguir integrando toda la preparación hasta que quede un líquido espeso.

– Aprovecha este momento para reservar un vaso del agua de cocción de los macarrones.

– Agregar a la salsa pimienta, el perejil picado y el queso rallado. A esta preparación no se le agrega sal, ya que el queso es muy salado.

– Cuela los macarrones y agrégalos a la salsa blanca. Integra muy bien todo.

– Por último, incorpora el agua de la cocción que habías reservado. Esto servirá para potenciar los sabores.

¿No te parece una preparación ideal para los niños? La combinación de pasta y queso es de las mejores del mundo. ¡Les va encantar!

No dejes de compartir esta receta fácil y práctica.